jueves, 27 de noviembre de 2014

Triunfo Arciniegas / Diario / Consideraciones sobre el dolor

From hand to hand
Jérôme Progin

Triunfo Arciniegas
CONSIDERACIONES SOBRE EL DOLOR
25 de noviembre de 2014

Dos noches y dos días consecutivos de intensos dolores echan a perder hasta los vuelos más altos. Toda la vida se convierte en dolor. El dolor impregna la mirada. Y lo único que uno quiere de la vida es que el dolor acabe, sea como sea. Luego vendrá el alivio o el olvido o esa otra dimensión de las cosas que es la misma muerte. Algo vendrá. El dolor, insaciable por naturaleza, ataca una y otra vez, recoge sus fuerzas como lúcido estratega y regresa. Siempre regresa. El dolor, finalmente, consume la materia que lo alimenta.

El dolor constituye la esencia de la vida y su raíz más profunda, así como la maldad es la esencia del ser humano. Lo demás son pausas felices, fugaces pausas dentro esa otra fugacidad que es nuestra existencia, aguas protegidas con débiles argamasas. El dolor no descansa, ladra hechizado y se avalanza como una bestia para derribar nuestros frágiles muros. Frágiles, porque tarde o temprano todos serán derribados. Se trata de una pelea perdida de antemano. 

Que no haya más dolor, suplica el hombre, y le parece imposible que algún día, en alguna hora, conquiste el territorio del alivio, y una vez alcanzado no puede creer que el dolor haya sido tanto y hasta se cree capaz de volver a soportarlo.



No hay comentarios: